martes, 17 de septiembre de 2013

Motivos de los infractores para participar en encuentros restaurativos

En muchas ocasiones, hay gente que pone en duda los motivos de los infractores para participar en un encuentro restaurativo con la víctima, no son pocos los que  me han comentado sus dudas."¿no lo harán porque obtienen beneficios penitenciarios o guiados por la posibilidad de obtener una ventaja?", esto me lo han repetido muchisimas veces.
 
Sin embargo, estas personas no tienen en cuenta varias cosas:
En primer lugar, ya existen para los infractores, la posibilidad de obtener beneficios penitenciarios, por ejemplo, atenuante de reparación del daño, confesión...etc y todos ellos están contemplados en la ley pero sin la posibilidad de que la víctima decida cómo quiere ser reparada, o pueda valorar como entiende esta  confesión. Estos beneficios que contempla la ley, en el sistema penal tradicional, no hace al infractor un agente activo, simplemente se va a  limitar a intentar eludir o mitigar la pena que le pueda corresponder, es en estos casos cuando todo lo que hacen es por conseguir ciertos beneficios o incluso eludir la pena. Realmente es curioso porque es la justicia penal tradicional, la que pone a disposición del infractor los elementos para eludir su responsabilidad en el hecho o incluso quitarlo importancia, todo ello sin participación de la víctima.
 
Sin embargo, la Justicia Restaurativa y los procesos restaurativos como encuentros víctimas-infractor, favorecen la asunción de responsabilidad, y convierten a muchos infractores en agentes activos para el cambio, aprenden que el que hace algo mal, debe hacer lo necesario para compensar el daño que causó. Y aunque parezca extraño, muchos infractores, manifiestan que no hay nada más difícil, que enfrentarse cara a cara con la persona a la que causaron el daño. Es algo que para muchos resulta un proceso más "duro" que el propio juicio penal, ¿por qué? pues porque muchos delincuentes no ven a las víctimas como seres humanos, intentan justificarse pensando que  el daño no ha sido tan grave, que quizá la víctima se lo podía permitir o simplemente, no asocian el daño con una persona. El encuentro restaurativo permite al infractor poner rostro e historia a la víctima, ven que es una persona normal, que no merecía el daño que sufrió. Estos encuentros sin duda, generan en muchos infractores ese punto de inflexión necesario para querer cambiar y no volver a delinquir. Y estos procesos son voluntarios, y en delitos graves no obtendrían beneficios penitenciarios a priori, con lo que pensar que lo hacen sin sentir verdaderamente la necesidad de reparar el daño y escuchar a la víctima , es algo que pierde peso. Recuerdo la historia de un infractor, reincidente, entró a robar en un casa en Inglaterra, allí se encontró con el dueño, tuvieron una pelea y al final fue capturado por la policia. En principio, a un delincuente reincidente, toxicómano de familia desestructurada, muchos le habrían dado por "perdido" y pensarían que no hay reinserción posible para él, pues en contra de los prejuicios,  se reunió con la víctima, estando ya cumpliendo su condena, y según este delincuente, fue la primera vez que realmente se dió cuenta que con sus robos, estaba causando un daño terrible a muchas personas inocentes, hasta que no escuchó a la víctima hablar de sus sentimientos con el delito, no reconoció la humanidad existente en las víctimas de sus crimenes, y fue cuando encontró su propia humanidad. Cuando cumplió condena  dejó su adicción y se convirtió en firme defensor de la justicia restaurativa, ¿Por qué? Claramente esta justicia rescata la humanidad de los delincuentes y ayuda a muchos de ellos a reconectar con la comunidad.
 

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