lunes, 16 de febrero de 2015

Se debe promocionar la Justicia Restaurativa, pero de forma adecuada no confundiendo a los ciudadanos

Siempre me preocupa que no esté claro qué es la Justicia Restaurativa, al menos en España, no solo no está claro sino que el concepto se usa como comodín para todo, cuando se quiere hablar de una justicia penal diferente. Siempre me preguntan por un buen curso de justicia restaurativa y realmente les tengo que comunicar que a fecha de hoy no he encontrado uno que realmente oferte lo que dicen. Lo último que me ha dejado un poco enfadada, es un curso de especialización en justicia restaurativa, ofertado por un asociación de jóvenes empresarios y una empresa en concreto. ¿Por qué me ha dejado enfadada? Porque el curso cuesta casi 300 euros y en el curriculum de los profesores además de poco o nada experiencia en justicia restaurativa, nada hace indicar que se vaya a hablar de justicia restaurativa sino exclusivamente de mediación penal.
 Una vez más y para variar se confunde y asimila la mediación penal como si fuera justicia restaurativa. Y para probar lo que digo, no hay nada más que ver la publicidad del curso; después de titularlo especialización en justicia restaurativa, se dice de forma literal: "Tiene por objetivo formar en los conocimientos teóricos y las técnicas y habilidades necesarias para el ejercicio profesional de la mediación dentro del ámbito penal. Capacitar para la gestión y mediación de conflictos penales.

Está destinado para todas aquellas personas que han finalizado sus estudios en Mediación y sienten la necesidad de especialización o complementación y, personas que con una larga trayectoria profesional quieren reorientar su vida profesional"

Me pregunto yo, si es de justicia restaurativa porque en sus objetivos no se pone acento en esta justicia y solo se habla de adquirir habilidades para la mediación penal....sin duda, el curso debería haberse llamada de mediación penal, pero claro como Justicia Restaurativa está de moda hay que poner esta palabra para que quede más bonito y atrayente el curso y justificar su alto precio por solo dos días.

Como forma de promocionar la mediación penal, como una herramienta de la justicia restaurativa, me parece un curso interesante y sobre todo siempre es bueno y loable que se hagan estas iniciativas, pero si al hacer esto, se va a transmitir al alumno conceptos equivocados, esto sin duda nos va a perjudicar a todos, ya que va a ser pan para hoy y hambre para todos. 

En un momento en el que pronto estará en nuestro derecho interno la directiva sobre derechos de las víctimas, en la forma del Estatuto de las Víctimas, es hora de que los "teóricos" expertos tengan claro que mediación y mediación penal no es lo mismo, que la mediación penal no es la única herramienta restaurativa, pero que esta mediación penal no se puede entender sino es inspirada en la justicia restaurativa. Y que cuando los servicios de justicia restaurativa tengan amparo legal en el futuro estatuto de las víctimas, se van a poder hacer mucho por las víctimas, y no solo por los infractores de una forma restaurativa, en la que los encuentros, ya sean mediación penal, conferencias, círculos o cualesquiera otro, serán un gran aliado. Pero ya se va a dejar de pensar que solo se puede usar la mediación penal, igual que se va a dejar de pervertir esta justicia restaurativa, asociándola al perdón de forma casi exclusiva y a que con esta justicia el infractor va a obtener beneficios penitenciarios de forma automática. La Justicia Restaurativa, y los encuentros que surjan de ella no pueden ser "utilizados" en aras a una puerta abierta para que los infractores eludan la prisión o escapen a ella, al menos, no la justicia restaurativa en si misma, otra cosa es que a través de los procesos restaurativos, los infractores asuman su responsabilidad de forma sincera y no por motivos espúreos y se comprometan a reparar el daño, de acuerdo a las necesidades de las víctimas ( no solo pidiendo perdón) entonces si podremos decir que gracias a lo que esta justicia consigue, el infractor está preparado para su vuelta a a la sociedad o para darle una segunda oportunidad. Solo así se puede justificar una justicia restaurativa que "sane"a las víctimas, y reintegre a los infractores o evite su estancia en prisión cuando sea posible y porque así lo contempla la ley. Muchos leerán esto y hablaran del abolicionismo, realmente yo no creo que la justicia restaurativa surgiera para abolir el sistema penal sino para complementarlo, y aun así se podría decir que gracias a los objetivos de la justicia restaurativa, una persona eludirá la prisión pero no por el simple hecho de participar en un proceso restaurativo

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